http://www2.eluniversal.com.mx/pls/impreso/noticia.html?id_nota=46579&tabla=ciudad"
"El trabajo constante y la dedicación plena han sido las principales armas del éxito de Raymundo Espinoza Isidro, dueño de las taquerías El Pastorcito, de las que una franquicia, dice, valdría por lo menos 50 mil dólares.
Este hombre, originario de San Nicolás Buenos Aires, en Puebla, asegura que a sus 52 años duerme pocas horas, ya que la mayor parte de su tiempo lo dedica a estar al pendiente de lo que necesitan en cada uno de sus tres establecimientos.
"El éxito de mi negocio es el trabajo constante, estar siempre al pendiente y hacer las cosas bien."
Recuerda con nostalgia lo que sufrió al llegar a la ciudad de México, cuando, en ocasiones, apenas ganaba dinero para "mal comer".
Añade que a lo largo de su vida ha desempeñado un gran número de empleos, que van desde lavador de automóviles en un comercio, mensajero, ayudante de intendencia y chofer particular.
"Cuando inicié, hace 25 años, no contaba con los recursos económicos para sostenerlo, por lo que tuve que pasar de empleo en empleo, hasta juntar unos centavitos con los cuales compré mis instrumentos", relata.
Espinoza Isidro menciona que al iniciar en este ramo tuvo varios fracasos, ya que antes abrió hasta en dos ocasiones una taquería por Pantitlán, pero no pegó.
Sin embargo, en su tercera oportunidad consiguió un pequeño local en la calle de Lorenzo Boturini, colonia 24 de Abril, delegación Venustiano Carranza, y ahí, dice, empezó a vender con éxito.
Su primera venta, recuerda, fue de 15 kilos de carne.
Con su tradicional vestimenta vaquera, "El Pastorcito" señala que esa cantidad ha aumentado hasta rebasar el cuarto de tonelada diaria, de domingo a jueves.
"Porque los viernes y sábados vendemos como 600 kilos más; esto nada más aquí, que es la matriz".
En tanto, sus sucursales de Texcoco, en el estado de México, y la de Cafetales, en el DF, venden a diario un promedio de 180 kilos y los viernes y sábado llegan a los 250 kilos por día.
Unas ?gringas? para los gringos
Una de su grandes satisfacciones es haber exportado la receta de su tacos a Atlanta, Georgia, Estados Unidos, en el año de 1994.
Explica que unos coreanos, después de haber visitado su taquería en Lorenzo Boturini, le pidieron que formaran un sociedad, con el objeto de establecer un negocio.
"Fuimos, hicimos la instalación, llegamos a un arreglo, me pagaban un dinero de comisión mensual y yo los asesoraba, el negocio pegó muy bien, pero después de dos años estas personas me sacaron de la jugada".
Añade que ahora los extranjeros cuentan con una sucursal en Miami, Florida.
Comenta que los gringos , lo único que que cambiaron fue el nombre a sus negocios, que se llaman El Pastor.
"Después de que me hicieron esta jugada, me asesoré con un abogado en Los Ángeles, California, Estados Unidos, para ver si podía pelear, pero como fue un contrato privado no tuvo fuerza, no se recupero nada."
Sin embargo, dice estar contento en México, su tierra querida, sobre todo por brindar empleo a más de 100 jóvenes, que a diario llevan el sustento para sus familias, pues gozan de todas las prestaciones de ley.
Raymundo dice a cada momento que el éxito de su empresa es el trabajo constante, sobre lo que asegura hacer las cosas con amor."
Esta taquería la conocí porque en una encuesta del periódico, ganó como la mejor taquería del Distrito Federal. Como ya hemos discutido anteriormente, talvez sea de los mejores pastores de la ciudad, pero cada taqueria tiene lo suyito.
En la foto vemos al reconocido Taconoisseur Oscarito Reyes, degustando los clasicos pastores.
